Vivimos en un mundo extraño.

Me ha pasado esto la otra  mañana, una anécdota que me da pie para retomar los escritos en mi blog.
A ver si así expreso lo que pasa a mi alrededor. Que lo tomamos como natural pero si lo analizamos
ni es natural ni es normal.
Estando tomando un cortado a eso de las 11´30 de la mañana un día cualquiera en un centro de ocio

donde hay bar, maquinas de jugar y mesas de billar. Todo es paz y tranquilidad a esa hora todos

somos jubilados ó parados. De momento se oyen gritos en el establecimiento e insultos y demás piropos. Me acerco a ver que pasa y la escena es la siguiente una mujer poniendo verde al marido
por estar jugando al billar (por lo que dice es adicto al billar) (increíble adicto al billar) En un descuido del marido, que también le contesta con piropos, la mujer le arrebata el

Taco de Saque

taco de jugar y tras varios intentos lo rompe contra el suelo en tres pedazos
( por que veo lo que queda de el es un taco PREDATOR con números y letras).
Acto seguido los asistentes al espectáculo pedimos calma y los responsables del local también y se les acompaña a la puerta de la calle con buenos consejos. Cada uno se va por una esquina diferente.
Por lo que he sabido después (me han dicho) los dos a su casa que era hora de comer.
Nadie sabe lo que habrá pasado en la mesa de comer.
Lo cierto es que a el ya no se le ve jugar tantas partidas de billar.
Me parece extraño o por lo menos anormal.
                                                                       Juanjo